domingo, 28 de noviembre de 2010

y sin respuesta...

¿No les ha pasado que a veces mandan un sms esperando una respuesta? y aunque no quieras vives pegado al celular esperando a ver en qué momento suena y vibra (o solo una de las dos) para leer la respuesta de la otra persona, y resulta  más frustrante cuando no recibes respuesta o aun peor cuando recibes una que no esperabas.

Supongo que éste es un sentimiento  generalizado producto de la adicción a las nuevas tecnologías y a veces, de la necesidad de que la otra persona nos diga un poco de sus pensamientos a través de un mensaje, o quizá solo sea un poco de alucinación mía.

Es verdad que esta es la última entrada obligatoria del blog para el curso de taller, pero debo decir que escribir aquí me sirvió mucho para desahogar sentimientos, frustraciones, alegrías y encanto por la vida, además de proporcionarme cierta disciplina, lo cual siempre se agradece.

Agradezco a aquellos que se tomaron minutos para leer mis locuras y para escribir comentarios que me hacían sonreír, de verdad mi más sincero agradecimiento y debo decir que escribiré entradas muy seguido, quizá al mismo ritmo que lo hice este semestre, esperando que algún curioso se interese por lo que pueda escribir y que pueda por este medio, algún día publicar un cuento, lo cual me gustaría muchísimo.

Entonces es así como no diré un adiós, ya que esto aun no termina. Las letras seguirán siendo mi mejor herramienta para comunicarme y para que ustedes puedan conocerme. Sin más, les mando un gran beso y espero lean las próximas entradas ;)

viernes, 26 de noviembre de 2010

viernes!!!

La verdad es que hace mucho que no esperaba tanto un viernes, aunque creo que inconscientemente siempre lo hago, sin embargo, ahora esta sensación de espera por el fin de semana se hizo evidente.
Esta semana fue de verdad un show como algunos dirían, el final de semestre siempre es algo pesado y con gripe resulta una verdadera tormenta, pero al llegar a mi casa el día de ayer mi tío me dio unas patillitas mágicas, un medicamento llamado next, se los recomiendo mucho si tienen una gripe de esas que ponen de malas y te impiden siquiera continuar con los vicios como msn y facebook  jajajaja
Pero gracias a Dios llegó el viernes y con ello un fin de semana en el que sin bien, extrañaré mucho a mi novio podré pasarlo al lado de mis amigos que tanto amo, así que por hoy iré a arreglarme y a todos los lectores de este blog, les deseo un buen cierre de ciclo escolar y un muy agradable weekend  ;)

domingo, 21 de noviembre de 2010

Cada Una De Tus Cosas Andres Calamaro


Para los que no conozcan a este gran músico argentino, su nombre es Andrés Calamaro y hoy que prendí un rato la caja idiota como muchos le llaman, escuché una de sus canciones y recordé los buenos momentos que me brindó su música, tanto melancólicos como aquellos en que me permitieron recordar amores del pasado, y porque no, del presente.

En lo personal una de mis canciones favoritas es Cada una de tus cosas y no sé porque me vino a la mente la vulnerabilidad que significa estar enamorado de alguien, es una sensación indescriptible, en algunos momentos maravillosa, en otros, atormentante, y como él dice a veces en el cielo, en el suelo y en cada una de tus cosas pero como un amigo me dijo por ahí a disfrutar el amor, al final que no nos vamos a casar con esa persona, sabio consejo que sin duda hoy me sirve de mucho.

A continuación les pego la letra de la misma, esperando que tengan una bella interpretación de la misma, pues la música siempre es un lugar donde podemos echar a volar la imaginación.

Mirando el río una rumbita te escribí
mientras te esperaba,
con el pechito inquieto y alegre,
y un andar de no ser de acá.

De aquí no me moví de tu vértigo mío,
de tu sonrisa vertical, que misteriosa es una rosa de Hiroshima
y la rumba que hay.

La rumba se ríe, no sabe si es rumba, Letra de Cada una de tus cosas - Andres Calamaro - Sitio de letras.com
será un momento nada más,
de eternidad, de esos que me da.

Todos los días, todos los segundos
infinitamente, la alegría de vivir,
el sentido que da la vida vivir contigo.

En el cielo , en el suelo, en cada una de tus cosas,
En el cielo , en el suelo, en cada una de tus cosas.

viernes, 19 de noviembre de 2010

lindas palabras...

Considero que cualquier buen escritor debe tener la facilidad de poner trasmitir a través de las palabras, la serie de pensamientos e ideas que revolotean en su mente, ello de manera clara y no confusa como suelen presentarse estas concepciones en el mundo interno de cada ser humano.
Sin duda, esta situación complica la realidad y la tarea de todos aquellos que quieran comunicarse a través de la grafía resulta una tarea nada sencilla, pero considero muy divertida, ya que para poder plasmar lo que se piensa se necesita mucho ingenio, además de más imaginación y creatividad con la que se cuenta.
 Esto lo menciono porque el diario español El Paí,s ha publicado que hoy uno de mis más grandes iconos, José Saramago, habría cumplido 88 años, y por dicha razón se estrena una película-documental que nos muestra un poco de su vida junto a su esposa Pilar del Río, traductora al español de muchas de sus obras y de la cual el autor y Premio Nobel de Literatura, expresaba en hermosas palabras el gran amor que en él generaba.
Dicen que una imagen habla más que mil palabras, y yo no dudo que Pilar del Río fue una mujer sumamente afortunada de tener a un hombre tan erudito como Saramago a su lado, pero sobre todo, de conocer a un hombre que le expreso su amor en lindas palabras y con el que pasó 27 años de su vida, no cualquier cosa ¿verdad?
Yo espero ya con ansias poder ver esta película y conocer un poco más de la vida de alguien que ha arrancado risas y sonrisas de mi rostro, ampliado mi vocabulario y enriquecido mi vida con historias hermosas, construidas de lindas palabras.
Así que si alguien está interesado en saber un poco más de Saramago, no dude en acompañarme a ver el largometraje, y conocer más a la persona y al escritor detrás de las palabras.



domingo, 14 de noviembre de 2010

¿Por qué lloran los ángeles?

Siempre he pensado que aquellos seres humanos que nos aman y que están con nosotros sin importar cuantos defectos tengamos son ángeles terrenales, y bien los podemos encontrar tanto en la familia como en aquellos que se convierten en una y que comúnmente llamamos amigos.
Pero ¿qué pasa cuando lastimamos o lastiman a uno de nuestros ángeles? Simplemente no podemos evitar ponernos tristes, ya que el simple hecho de ver llorar a un ángel significa que algo no marcha bien y que quizá es hora de cambiar el rumbo con tal de que ese ángel siga alumbrándonos con su sonrisa.
La verdad no me gusta ver llorar a mis ángeles, menos verlos tristes por algo o alguien que quizá no valga la pena, así que a aquellos seres celestiales que aprecio tanto les pido que mejor regalen sonrisas, esos gestos tan hermosos que proporcionan alegría y que antes de volver a sufrir, piensen en lo feliz que hacen con su simple presencia a seres terrenales como yo.
Así que ya saben, como dicen por ahí: al mal tiempo buena cara y gracias por existir y ser ángeles en mi vida, los amo.

viernes, 12 de noviembre de 2010

te extraño...

Debo decir que hace mucho que no me pasaba por la mente extrañar a alguien, sé que no es algo que se piensa, sino que se siente, pero aun así considero que para experimentar un sentimiento debe “caerte el veinte” como se dice por ahí, para poder siquiera disfrutarlo, sino puede pasar como cualquier otro suceso cotidiano.
Es verdad que por periodos cuando no veo a mis amigos ya sea por el trabajo que implica estudiar, o bien por los periodos largos de vacaciones que no permiten verlos a diario, experimento ese sentimiento de extrañarlos, pero hace tiempo que no pensaba ya estar sin alguien y querer estar con esa persona el mayor tiempo posible, sí, ya sé que estarán pensando que me he vuelto una cursi, pero quizás solo estaba bien escondida detrás de ese disfraz de conejo que tengo jajajaja
La verdad es que hoy extraño a esa personita especial en demasía, pero supongo que eso me permitirá verlo con más gusto y darle todos los besos de reserva que se han ido acumulando en este tiempo, además de que percibir esta sensación me advierte (de manera positiva) lo importante que es para mí.
Espero los comentarios sobre la cursilería que esto implica y sus experiencias en este rubro jajajaja sin más les deseo un muy agradable puente revolucionario.

domingo, 7 de noviembre de 2010

cuento...

La verdad es que desde hace tiempo he pensado en la construcción minuciosa de un cuento, todo ello debido a las casualidades propias de la vida que desean quedar recordadas en papel y a la necesidad misma de escapar por momentos a la realidad. No descarto la posibilidad de algún día poder publicarlo, recuerdo de niña haber escrito uno que publicó la SEP, aunque ha decir verdad no he podido acordarme donde quedo el escrito, pero supongo que algún día la inspiración podrá permitirme otra vez narrar una historia que pueda sorprender a muchos.

El cuento que a continuación cito de Cristina Pacheco publicado hoy en el periódico La Jornada, a mi parecer, retrata la vida de la mayoría de los mexicanos, en un país donde los gobernantes fuera de ofrecer soluciones, se proponen  planear espectáculos que encubran sus deficiencias al no saber hacer, como Sartori diría hacer “buena política”.

Sin mas, los invito a disfrutar este cuento y de ser posible, tomarme el atrevimiento de pedir sus opiniones respecto al mismo, pues como dicen por ahí “cada mente es un mundo” y sin duda, conocer otros diferentes al nuestro, siempre nos brinda la oportunidad de ampliar nuestras ideas y al mismo tiempo nuestras expectativas en muchos sentidos. Espero os guste ;)

El séptimo día
Cristina Pacheco

 
Dispuesto a salir, Tadeo se cruza la bufanda sobre el pecho y se frota las manos. Debido a la resequedad suenan como si fueran de cartón. Ágata, su mujer, le ha dicho mil veces que se ponga alguna crema suavizante. Él se niega a seguir el consejo. Está orgulloso de sus manos. La aspereza le representa la constancia de que, a pesar de la artritis incipiente, sigue siendo pintor.
No es el único oficio de Tadeo, pero es el que más le gusta; sin embargo, desde hace años, cuando se agravó la crisis económica, sólo ha podido ejercerlo los domingos. El resto de la semana realiza trabajos que le aseguran ganancias regulares. De lunes a miércoles selecciona cartón y fierro en una bodega; el jueves colabora en un dispensario; viernes y sábado atiende a la clientela de un bazar en donde los vejestorios y desechos pasan por antigüedades.
En cada uno de esos lugares Tadeo logra cumplir con sus obligaciones porque está consciente de que sin toda esa actividad no podría cubrir, como hasta ahora, los gastos de su casa, aunque sea pobrecitamente, y también porque lo estimula la ilusión del séptimo día.
Hasta hace unos años la pesadilla de Tadeo era verse imposibilitado para trabajar y entonces depender de sus tres hijos. Hoy no existe ni la más remota posibilidad de que eso ocurra, porque las cosas andan mal para todos. A Carlos le redujeron el sueldo en la embotelladora, ya no tiene alternativa de tiempo extra y los gastos de su familia son cada vez más gravosos. Jerónimo siempre ha vivido de las propinas que recibe en un restaurante típico. Le iba bien hasta que la clientela disminuyó por causa de la inseguridad. Desde entonces él se ha visto precisado a ir de mesa en mesa y, además de levantar las comandas, ofrecer las artesanías que confecciona Estela, su esposa..
En cuanto a Mireya, la menor, Tadeo ni en sueños le pediría ayuda. Sabe que ella, como cuidadora de enfermos, apenas gana lo suficiente para mantener a su marido, desempleado desde hace cuatro años y de tres para acá, rijoso y alcohólico.
II
En medio de esta situación, a Tadeo lo que más le preocupa son los niños, en especial sus nietos. Primero porque no entiende ni siquiera la forma en que se visten y segundo porque no imagina cómo será su futuro en un mundo devorado por la injusticia y la violencia, cada vez más cruel y caótico.
Lo documentan las imágenes en la televisión y en los periódicos, las conversaciones que por azar escucha en la calle, las escenas que se vuelven más y más cotidianas: cuerpos deshechos, casquillos percutidos, paredes y vehículos rafagueados.
Los únicos momentos en que Tadeo logra olvidarse de sus problemas familiares y de todos esos horrores que lo circundan son los que dedica a la pintura. Más allá de las ganancias que pudiera brindarle, antes ejercía su trabajo con la intención de devolverle su buen aspecto a toda construcción, por modesta e insignificante que fuese.
Lograrlo en unas cuantas horas de un domingo era ya suficiente esfuerzo y sin embargo se ha impuesto un nuevo compromiso: diseñar paraísos –aunque sea pobrecitamente, según su expresión personal– a base de pintura de aceite, tíner y tiempo.
Al principio no habló con nadie de sus planes, ni siquiera con Ágata. De haberlos conocido, ella habría dicho que a su esposo, aparte de los huesos de las manos, se le está deformando el cerebro. De otro modo no podría explicarse que a Tadeo se le haya ocurrido convertirse en una especie de creador de brocha gorda en vez de permanecer con ella los domingos para ayudarla en las compras y los preparativos de la comida familiar.
III
Viéndolo bien, Tadeo reconoce que sus nuevos objetivos son una locura, pero se disculpa pensando en que, después de todo, la idea no fue suya, sino de la madre Consuelo. Es superiora de un asilo para niños frente al que Tadeo pasa rumbo al Metro. Siempre que la encuentra en la calle vigilando que el barrendero deje limpia su banqueta se detiene a conversar con ella.
Para su sorpresa, Tadeo la encontró un domingo en la puerta. Estaba esperándolo porque deseaba encargarle un trabajo: que le pintara el patio de juegos. Antes de comprometerse, él quiso verlo para calcular tiempo y costos.
No conocía el interior del asilo. Se encontró en un edificio grisáceo y un cubo de cemento rodeado por cuatro paredes altísimas, salitrosas y adustas. Imaginó con tristeza los juegos de los niños entre semejante aridez y se puso a hacer cuentas hasta que pudo decirle a la superiora el monto de su trabajo y los galones de pintura blanca que iba a necesitar.
La madre Consuelo le sonrió de una manera extraña y le dijo que pensara en otros colores. Ella quería que Tadeo recubriera las paredes con un paisaje lleno de árboles, flores y todo aquello de que los asilados sólo podían disfrutar en los esporádicos días de paseo.
Tadeo le preguntó por qué, en vez de plantas pintadas, no adornaba el patio con otras naturales. La Superiora expuso su razón: con su mínimo presupuesto era imposible adquirir flores y renovarlas conforme fueran muriendo. Necesitaba algo duradero por encima de las estaciones. Aunque le gustaba la idea, Tadeo se confesó incapaz de hacer ese trabajo, ni siquiera pobrecitamente.
La madre Consuelo no se dio por vencida: le recordó la conversación en que él le había hablado de sus tiempos como alumno en la academia de pintura Velázquez y los problemas cuando su padre se enteró de que él se escapaba de la escuela para irse a pintar a las plazas y los jardines. Él dijo que de eso hacía mucho tiempo, sus manos se habían entorpecido y ya no recordaban cómo se toman los carboncillos y los pinceles. La superiora le sonrió otra vez: Acuérdese de que Nuestro Señor creó el mundo en siete días a partir de la nada. Lo espero el domingo.
Tadeo, en secreto, cedió a la tentación. Durante varios domingos consecutivos hizo que su memoria recuperara lo olvidado. Las paredes adustas florecieron al toque de los pinceles con los que en la última sesión, en el ángulo inferior de una pared, el pintor dibujó su nombre.
Cuando la madre superiora le entregó el resto de su paga dijo algo que cambió la vida de Tadeo: debería sentirse feliz porque les dio a mis niños un paraíso. Mientras permanezcan aquí se sentirán alegres al verlo, cuando se vayan lo recordarán con alegría y agradecimiento hacia usted.
IV
Tadeo pensó que allí terminaba su aventura creadora y se dispuso a restablecer el trato con sus brochas gordas. No fue así. A la ida o al regreso de alguno de sus trabajos se fijaba en las casas y las escuelas de aspecto sombrío en donde con sus pinceles podría inventar otros jardines.
El problema radicaba en cómo explicarle su interés a Ágata. Empezó por contarle su experiencia en el asilo y para granjearse su consentimiento le dijo que vería la forma de trabajar en la escuela a la que asisten sus nietos. No obtuvo ninguna ganancia por dibujar paisajes primaverales en las paredes de corredores y patios, pero se compensó con la idea de que sus descendientes permanecerían, al menos por unas horas, protegidos contra la violencia y la fealdad del mundo gracias a su empeño de plasmar imposibles y nuevos paraísos.
Luego siguió con otras escuelas del rumbo. Ágata le permitió lo que ella consideraba un capricho, a condición de que cobrara aunque fuese pobrecitamente por su trabajo. Esta vez él sí acató el consejo. Cuando los clientes escasearon enfiló sus baterías hacia las espaldas de los edificios y los inhóspitos estacionamientos.
Por el momento trabaja en uno que tiene muros de adobe con mechones de hierba silvestre en los pretiles.
Empieza muy temprano y termina a las dos de la tarde fatigado, hambriento y listo para escuchar las reconvenciones de Ágata: aún no le perdona que la deje sola con el trajín dominical para irse a la calle a satisfacer una extraña manía que nadie toma en cuenta y por la que gana muy pobrecitamente.
Tadeo la escucha tranquilo, resignado, mientras pone bajo el grifo del agua las manos manchadas con las pinturas que le sirvieron para inventar fragmentos de un nuevo paraíso.

jueves, 4 de noviembre de 2010

torre de marfil

Hace un par de días, me encontraba en la biblioteca Central de nuestra máxima casa de estudios, la UNAM, terminando un control de lectura, ya sabrán de esos que tanto me fascinan. Mientras sucedía  esto y sentía que en gran parte ya alucinaba a Medio Oriente, en mi ipod aleatoriamente se tocó la canción de Cerati llamada Torre de marfil, en lo personal una de mis favoritas pues me recuerda una época de la prepa muy especial, sin miedo de volver a repetir.

Mientras me ponía a tararear la canción y con ello molestar a los compañeros, di click en la PC para guardar mi documento y de esta forma poder enviarlo a mi correo, cuando se abrió la carpeta de documentos encontré uno con el mismo título de la canción de Cerati, y pensé que quizá el hada de la inspiración me estaba jugando una broma.

Es verdad que pensé esto en un primer momento, pero también la curiosidad y la coincidencia del momento me llevaron a abrir aquel documento; antes de ser acusada de plagio debo decir que el archivo no contaba con autor, pero aclaro de esta forma que no son ideas propias, que cito de un documento de la biblioteca central, y que si algún día por azares del destino el autor encuentra en este blog sus ideas plasmadas en las palabras citadas, no dude hacer el debido reclamo, o mejor dicho la debida aclaración.

Brevemente el autor habla sobre la Revolución mexicana y los filósofos del Ateneo de la Juventud,  y considero que es un documento muy interesante, está escrito para una ponencia, sin embargo citó únicamente lo siguiente:

“Inicio esta ponencia retomando una figura harto conocida en el ámbito filosófico académico, esta es la del sabio aislado en su torre de marfil, la cual refiere al retraimiento del intelectual, a su reflexión en abstracto para evitar, consciente o inconscientemente, hacer caso de la realidad concreta”[1]

La verdad es que ya había pensado acerca de esto, no sabía que era una figura filosófica, pero encontrar esto amplio mi conocimiento, situación que siempre se agradece. Ello me llevó a meditar un poco sobre el tema de lo cual comparto lo siguiente:

¿De que sirve aislarse en una “torre de marfil” sin tener contacto con la realidad cuando ésta modifica y establece las formas, los movimientos y el curso de los fenómenos? Supongo que para algunos es mas fácil distanciarse de la realidad, pues como dice un profesor mío, la realidad es terca y considero que a veces no deja tiempo para la aplicación de teorías. Supongo que alejarnos a ratos de lo real, nos permite crear un estado de confort, pero ¿hasta qué punto crear un mundo propio nos puede librar del duro golpe que puede ser enfrentar la realidad?

Supongo que hay que encontrar el balance, pues ¿qué es la vida sin sueños y sin mundos imaginarios? y ¿qué es la realidad sin mundos que nos permitan escapar por un momento de lo que se vive? Además, la imaginación siempre nos ayuda a crear alternativas, porque considero que el mundo no será como está, y si podemos ayudar a que sea un lugar más placentero ¿por qué no intentarlo? yo lo intento, espero que ustedes amigos hagan lo propio ;)


[1] Autor desconocido, “La torre de marfil. La Revolución mexicana y  los filósofos del Ateneo de la Juventud”, Documento encontrado en la Biblioteca Central de la UNAM, p. 1

domingo, 31 de octubre de 2010

Musik

¿Alguien ha pensado que sería la vida sin música? yo no puedo concebirlo, es como cuando te dicen que el universo es infinito e intentas idearlo y solo puedes pensar en enormes proporciones, es verdad que quizá la imaginación ayude un poco, pero resulta imposible para mi imaginar situaciones como esas, debido a que sin duda, me considero una melómana.
Hace poco alguien compuso una canción para mi, y la verdad es que la primera vez que la escuché fue una sensación indescriptible, de esos sentimientos que experimentas por primera vez y que llegan a causar alegría desbordada y me permiten ampliar mi abanico de sensaciones, de ellas nos sentimos vivos.
Lo mismo me pasa con la música, no puedo estar sin ella, me permite imaginar situaciones, historias, momentos y recordar personas. Por ello, el deleite que de ella proviene es indescriptible, debido a que la música también proviene de los sentimientos, e intentar describirlos, es quitar la magia de lo que se vive y sueña. Espero que en todos los universos paralelos exista la música, pues al igual que el amor, es un lenguaje universal y tan especial para cada ser vivo, que a veces el hecho de imaginar situaciones a través de ella, nos permite de cierta forma, adueñarnos de ella y hacerla parte de nuestro soundtrack personal.
Sin duda, la vida sin música no sería lo mismo, por ello agradezco al arte, y como alguna vez dijo Nietzsche: tenemos el arte para no morir de la verdad.

viernes, 29 de octubre de 2010

happy birthday to me!!!!

En esta ocasión les platicaré que pasó en mi cumple!!! No suelo compartir experiencias personales pero esta vez, considero, lo amerita.
La verdad es que recuerdo haber nacido un 27 de octubre… el año aun no he podido recordarlo. Comencé este 27 de octubre de 2010, año para el cual, aun mi edad verdadera sigue siendo un misterio, situación que continuará hasta el momento en que pueda recordar la fecha en que seguramente hice sufrir a mi mamá  en mi intento por conocer el mundo, el cual, años más tarde, intentaría conocer de una forma más precisa y que en momentos detestaría conocer debido a la compleja naturaleza humana.
Continuando con la primer idea, el día comenzó, como es de costumbre, con mucha tarea; una exposición sobre África y una futura negociación complementaban el cuadro de estrés. En este punto fue mi hermana quien me sorprendió con unos pastelitos, a los que añadió solo 4 velitas en representación, supongo, de los años muy bien vividos jajajaja.
Después de tan grata sorpresa, uno de mis mejores amigos marcó para cantarme unas lindas y entonadas mañanitas, lo que me alegró bastante y para lo que después había que continuar con la extensa labor de investigación que implica la tarea. Así continuó mi día con muchas horas sin dormir y con una negociación en Tlatelolco, en un recinto dicho por mi profesor lleno de historia y que sin duda, impone una energía que podría paralizar a cualquier espectador.
Más tarde me dirigí hacia la facultad a exponer sobre la resistencia de los africanos a la colonización, y la verdad es que después de 30 horas sin dormir, lo único que podía imaginar era mi cama y una buena cobija para recuperar las horas de sueños perdidos.
Al llegar a mi casa, me esperaba un regalo divino, un hermoso arreglo floral y un pastel  de chocolate, detalles que me reanimaron la noche y me permitieron ir a la cama con una sonrisa en el rostro, no sin antes ir a responder los lindos mensajes que publicaron en mi perfil mis amigos y que agradezco infinidad pues me permitieron disfrutar un largo rato de alegría y felicidad, esos sentimientos de los que uno nunca se cansa, de verdad muchas gracias.
Y fue así como concluyó mi largo día lleno de sorpresas y sonrisas del que tengo que agradecer a todas las personas que hacen mi vida un hermosos sueño, y que gracias a ellas puedo volver a confiar en el ser humano, sin más, un agradecimiento sincero, los quiero J


jueves, 21 de octubre de 2010

de sonrisas apagadas...

Hoy es de esos días que preferiría no darle tanta importancia en mi vida, quizá porque precisamente marca un punto de quiebre en mi concepción del mundo y una vez más me demuestra que todo es tan cambiante que probablemente, el peor error que podamos cometer, sea permanecer estáticos ante el universo, cuando éste se modifica a cada instante.

Las lágrimas  y la hoja en blanco son medios que permiten liberarme de los sentimientos que oprimen mi cuerpo, quizá no había pensado nunca que escribir me proporcionaría tanto bienestar y libertad.

Quizá a través de la conducción de mis ideas en palabras, los sentimientos y los recuerdos me proporcionan una alternativa, una razón por la que sonreír, aunque hoy las sonrisas se hayan apagado por un momento, pero así como la luz solar inicia el día y establece una nueva oportunidad, las sonrisas  seguramente se volverán a generar en mi rostro el día de mañana, continuando desafiantes con el reto que implica el simple hecho de vivir.

De sonrisas apagadas pero nunca agotadas,  porque se dice que la mejor manera de enfrentar los problemas es con una sonrisa y siempre hay un motivo por el cual hacerlo, así que solo estarán apagadas un momento, solo para hacerme recordar dónde esta la luz para encenderlas y así, continuar iluminado mi camino.

miércoles, 20 de octubre de 2010

adicciones...

Al pensar en adicciones siempre algo negativo nos viene a la mente; sin embargo, en mi caso, las adicciones a las que haré alusión no tienen nada que ver con sustancias que alteran nuestros cinco sentidos, y que en ocasiones nos permiten pensar que hasta contamos con uno más o que lo hemos desarrollado en el transcurso de los alicientes de la felicidad que hemos consumido.
Es por ello que si vamos a hablar de adicciones, debo declararme adicta a las sonrisas, las risas, los besos, los abrazos, los colores, los aromas, a la música y a una serie de interminables factores que permiten que se dibuje una sonrisa en mi rostro cada vez que puedo disfrutar de estas cosas.
Sin duda, las adicciones no siempre tienen que tener efectos secundarios negativos, las adicciones pueden proporcionarnos ratos prolongados de felicidad, siempre y cuando las sustancias o los elementos a los que nos declaremos adictos sean saludables y nuestro estado de ánimo nos permita generar una serie de sentimientos agradables, porque de lo contrario, las adicciones solo podrían llevarnos a un vacio tan profundo, que la rehabilitación no podría garantizarnos la salida del inmenso hueco que hemos cavado.
Ser adicto a los sentimientos más sublimes, como el amor, tiene sus riesgos; una adicción llevada al extremo puede ser el mayor desastre que nos pueda ocurrir, debido a la naturaleza (o debilidad) del hombre a la dependencia. Por ello, es mejor saber manejar nuestros propios vicios y tratar de no caer en excesos, poder manejar nuestra vida y no dejar que ciertos factores la manejen. Por ello,  ser un no adicto es una forma viable de ser felices y sonreírle a este camino que llamamos vida.
Aunque pensándolo bien, espero no tener más adicciones que las mencionadas al principio de esta entrada, debido a la felicidad que me proporcionan y a las personas involucradas en ello, así que ojalá  más personas se incluyan a las adicciones sanas y disfruten de sus beneficios, y si saben de otra sustancia adictiva sana háganmelo saber, probablemente tendrán  a alguien más en su grupo de adictos ;)


domingo, 17 de octubre de 2010

¿Quién sabrá el valor de tus deseos?

Hace poco al escuchar y ver un video de Gustavo Cerati interpretando una de mis canciones favoritas de Soda Stereo, titulada en remolinos, me llevó a pensar acerca de los deseos que tenemos, de  nuestros deseos frente a alguien más, y de los pensamientos y deseos de alguien más hacia nosotros.
Escuchando esta canción también reflexioné sobre lo cambiante de la vida, y considero en este mundo, que quién permanezca estático no solo se está perdiendo de los grandes cambios que acontecen a nuestro alrededor, sino que también se está perdiendo la oportunidad de probar algo nuevo en su propia existencia, que quizá cambie su misma concepción del ser.
Es lo que me encanta de la música, el mosaico amplio de interpretaciones que puede brindarte, las diversas emociones que puedes llegar a sentir cada vez que tienes la oportunidad de escucharla, dependiendo en gran parte el contexto de sentimientos que estés experimentando, pero que siempre te permiten imaginar realidades alternas que en ocasiones, ayudan a sobrellevar el mundo propio.
Florecer mirándote a los ojos… perfección ♫ ♥ Una de mis frases favoritas de la canción, sumada a la que da título a la entrada de este blog. Sin duda, es mejor que cada quién interprete la música con estilo propio, así que a continuación les dejo el link de la canción de mi gran amor platónico Gustavo Cerati esperando que les guste, y si es posible, me den su interpretación del tema. Les mando saludos cariñosos!!! :D

http://www.youtube.com/watch?v=giQFj_gVmFE Una interpretación estupenda!!! Al final de la misma, viene una estrofa de otra de las canciones de Cerati, Fantasma, de su etapa como solista, muy recomendable, espero os guste ;)

jueves, 14 de octubre de 2010

De palabras..

Si las palabras pudieran dibujar obras de arte cuando las decimos, ¿cuáles serían las formas que plasmarían? Seguro habría días, semanas y hasta meses enteros en los cuales, podríamos crear las cosas más surrealistas y bellas que nuestro vocabulario nos permitiera, palabras como fantasía, amor e ilusión estarían en constante uso y los lienzos resultado de ello serían dignos de cualquier galería de arte en el mundo.

Pero, ¿qué pasaría si los pensamientos nos llevarán a emitir palabras hirientes, palabras que quizá dañen más que una agresión física? Seguramente nuestro cuadro se tornaría un  poco más obscuro, pero no por ello menos interesante.

Las sensaciones que se entretejen dentro del mismo ser humano, son tan fascinantes que probablemente, las imágenes puedan representarlas mejor que las frases que podamos expresar a través del habla, ya que considero que un lienzo puede dar pie a diversas interpretaciones, mientras que el uso del habla, en ocasiones, debido al pobre vocabulario que manejamos, limita nuestras oportunidades de utilizar un recurso tan bello como éste, además cuando expresamos algo a través de la palabra hablada, hay veces que no hay más que decir ni más que explicar.

En este sentido, podemos decir frases tan contundentes (hirientes en ocasiones) que no debemos explicar más, que aunque queramos corregir lo dicho, no se puede hacer tal cosa como cuando hacemos un escrito y estamos en la posibilidad de modificarlo, es por ello que es tan importante pensar antes de hablar.

 Seguro en este momento, si mis palabras dibujaran un lienzo, sería una imagen muy surrealista de la vida, ya que por un lado habría colores vibrantes y dibujos de ensueño, mientras que por otro, se plasmarían castillos de noche con una luna llena que no da todo por perdido, que recuerda que ante las tinieblas que puede representar esta etapa del día, siempre hay un espacio para la luz que puede embellecerlo todo, pero que, al  mismo tiempo, recuerda esa parte inherente del ser humano, la obscuridad, más latente en algunos seres humanos que en otros.

En lo personal preferiría la parte llena de colores, de dibujos bellos, pues me recordaría que gracias a todo lo vivido puedo apreciar aquello que me hace feliz, los momentos que me llenan de alegría y las personas que permiten que esa parte del cuadro sea tan vibrante y motivadora. Sin duda, si el método es viable, patentaré la fórmula, reformaré mi vocabulario, del cual, las palabras altisonantes ya no tendrían cabida, y palabras como fantasía, sueños, amor y alegría serían las más recurridas. ¿Por qué no? Como decía el español Pedro Calderón de la Barca: La vida es sueño.

domingo, 10 de octubre de 2010

definir...

Qué difícil suele ser definirse a uno mismo cuando resulta más sencillo diferenciarse de los otros y pocas veces comprender lo que nos es único y propio.
Es verdad que todos buscamos ser auténticos ante una población mundial de más de seis mil millones de habitantes, y en parte en esto basamos muchas veces nuestra búsqueda de identidad, sin embargo, considero que si tardamos tanto en distinguir lo que no somos, nadie nos asegura que no terminaremos pareciéndonos a lo que consideramos ajeno.
En ocasiones basamos lo que somos a partir de los comentarios de las personas, de lo que creemos ser si nos comparamos con los demás, debido a lo ajenos que nos sentimos a nuestra propia realidad, pero entonces ¿cómo saber quiénes somos?,  ¿acaso construimos nuestra personalidad como un simple reflejo de las experiencias que hemos vivido? o bien ¿solo somos un bosquejo de lo que en realidad buscamos ser?
La mayor parte del tiempo, pasamos introduciendo en pequeñas cajas, llamadas conceptos o definiciones, lo que observamos en nuestro entorno, de ahí la necesidad natural del hombre de saber lo que es, de definirse así mismo, y de diferenciar lo propio de lo ajeno.
Considero que definir lo que uno es, lo que puede llegar a ser, son concepciones que se modifican con el tiempo, los intereses que se presenten en el momento y la capacidad que tengamos para afrontar lo que se está viviendo, pero al final, definir lo que somos, quizá resulte el tema más complejo e inconcluso  de nuestra existencia.

jueves, 7 de octubre de 2010

Para liberar tensiones…

Al término de una extenuante tarea de Medio Oriente, nada mejor que escribir un poco para aclarar las ideas y despejar aquellas que atormentan, además de tener una buena sesión de música, como si se tratará de un concierto únicamente para mí.
Hace poco, (un par de horas mientras desarrollaba mi tarea), pensé en todo el estrés que acumulamos a lo largo de nuestras vidas, los malos ratos que nos hacen pasar, y lo inútil que resultar estresarse por cuestiones que si bien están en nuestras manos resolver o al menos agilizar su proceso, en un momento pasaran desapercibidos en nuestro baúl de recuerdos.
También me cuestionaba el mal humor que surge de situaciones estresantes, y los malos gestos o palabras que podemos hacerle a alguien mientras estamos histéricos por terminar los pendientes en nuestra agenda, situación que probablemente llegará a nuestro baúl de recuerdos como una mala experiencia mientras permitamos que el estrés controle nuestro humor, así que ¿por qué no ponerle una mejor cara al estrés y sonreírle hasta que desaparezca?
Esto me llevo a recordar una técnica que se practica en India y que se conoce como “yoga de la risa” en la cual, la risa se inicia como un ejercicio grupal, y pronto se convierte en risa real y contagiosa, gracias al contacto visual y al cultivo de una actitud infantil y juguetona.[1] Considerada como una medicina, sin duda la risa nos libera del estrés acumulado y nos coloca en una actitud más alegre y con una gran sonrisa dibujada en el rostro.
El nombre de Yoga de la Risa® deriva de la combinación de ejercicios de respiración del Yoga  con ejercicios de risa y se fundamenta en el hecho científico en el cual, ya sea que riamos de verdad o que simplemente simulemos reír, nuestro cuerpo no reconoce la diferencia entre la risa real o la risa simulada, obteniendo así los beneficios fisiológicos, bioquímicos y psicológicos, gracias a la secreción  por parte del cerebro de endorfinas y otros químicos “del bienestar” durante el acto de reír.[2]
Suena divertido ¿no? Sin duda, algún día me integraré a los clubs que practican este método para liberar la presión de vivir en una sociedad tan dinámica como la que se experimenta en la Ciudad de México, además considero que la risa es una de las mejores formas de sobrellevar los momentos difíciles y otorgan no solo momentos de felicidad para uno, sino también para los que nos rodean, situación que en ocasiones se agradece mucho.
Considero en lo personal la risa como una de las formas más bellas de expresión del ser humano, a esto sumo el buen humor, y las buenas puntadas que se nos puedan ocurrir. Así que ya saben, si desean descargar su estrés de una manera sana y divertida, sin tener que golpear a su hermano, o “despepitar” en contra de las personas que no les agradan, yoga de la risa es una buena opción para hacer más agradable la cotidianeidad :D


[1] Yoga de la Risa. Dirección URL: http://www.yogadelarisa.com.mx [consultado 07 de octubre de 2010]
[2] Ídem

domingo, 3 de octubre de 2010

¿arrepentimiento?

Hace poco al consultar el cuaderno de José Saramago en línea, un pequeño fragmento del libro  El año de la muerte de Ricardo Reis, me hizo reflexionar acerca del arrepentimiento, y el tiempo que tardamos reprochándonos cosas que llegamos o dejamos de hacer, y los conflictos que genera esto al interior del ser humano, pero ¿por qué para algunos no nos es tan fácil dejar ir las cosas y seguimos pensando en ellas como si esto fuera a modificar algo ya vivido?
A continuación cito el párrafo escrito por José Saramago, el cual en lo personal, me parece muy acertado, pues en ocasiones el ser humano solo espera obtener el perdón de los demás para continuar con los mandatos de su propia mente, que lo llevarán por senderos de los que quizá se arrepienta en un tempo posterior, pero que en el momento vivido generaran en él una nueva experiencia, la que probablemente más adelante, sea digna de contarse.
El arrepentimiento es la cosa más inútil de este mundo, en general quien se dice arrepentido lo único que quiere es conquistar perdón y olvido, en el fondo, cada uno de nosotros continúa satisfecho de sus culpas [...][1]


[1] Saramago, José, Otros cuadernos de Saramago, [en línea], Dirección URL: http://cuaderno.josesaramago.org/page/13/ [Consultado el 03-10-2010]

jueves, 30 de septiembre de 2010

La facilidad de dar un click


Hace tiempo al estar en uno de los mayores vicios de la red, Facebook, pensé acerca de la facilidad con qué podemos agregar o eliminar personas de nuestro “círculo de amigos” y la lejanía que crean las redes sociales para la interacción humana. Por un momento me puse a fantasear con la idea de que ojala así fuera de simple en las relaciones interpersonales de la dimensión real, dar un click y borrar por completo el contacto con esa persona, sin embargo, la realidad pone a prueba nuestras capacidades para aprender nuevos métodos de relacionarnos con los demás, aun cuando hay un punto de quiebre.
En este sentido, pensaba en los sentimientos que llegamos a experimentar cuando nos enteramos de una situación de la que quizá, sin contar con internet como herramienta, nunca hubiéramos llegado a conocer y es por ello que coincido con aquellos dichos populares que enuncian: ojos que no ven corazón que no siente, o el que busca encuentra, porque en realidad en este tipo de redes sociales podemos llegar a saber historias contadas de voz, o mejor dicho de letras, de los propios protagonistas, cuestiones que nos pueden llevar a la mejor de las euforias o a la más triste de las sensaciones.
Es cierto que las redes sociales en muchas ocasiones, sirven para mantener contacto con personas que se encuentran lejos de nosotros por diversas razones, o bien, amigos que por falta de tiempo no tenemos oportunidad de ver constantemente, pero ¿hasta qué punto las redes sociales son un beneficio para la “convivencia” con otras personas? Supongo que en cierto punto es un poco difusa esta situación, puesto que la convivencia física y el lenguaje corporal que puede llegar a proporcionar una persona, jamás podrá compararse con los mensajes publicados en el perfil, que si bien nos llegan a dibujar una sonrisa en el momento, no se igualan a los ratos de alegría con los amigos.
A veces sin notarlo, el hecho de agregar  a una persona basándonos en su aspecto físico, sin saber su origen ni nacionalidad, nos introduce en la lógica superficial a la que conllevan este tipo de redes sociales, o bien en otras, nos permite conocer cultura, idiomas o hasta paisajes de otros países a través de las fotografías que podemos encontrar en un perfil, esta ultima situación benéfica para enriquecer nuestro a veces limitado conocimiento visual.
¿Pero qué tan bueno es seguir teniendo “contacto” con esas personas que por alguna razón decidimos o decidieron salir de nuestras vidas? En ocasiones resulta sano dejar de saber acerca de ellas, en otras, si aun estamos interesados resulta doloroso o esperanzador, y es por ello que el papel de observador incognito que nos permiten jugar las redes sociales resulta tan atractivo.
Un click puede complicarnos el día entero, o si corremos con mejor suerte, puede proporcionarnos un día completo con una sonrisa en el rostro, pero no hay que dudar que este tipo de redes sociales son un producto divertido, nos distraen en momentos estresantes, nos permiten estar de curiosos en lo perfiles de las personas, solo no hay que olvidar como dicen por ahí que la curiosidad mató al gato.
Así que mientras resulte divertido dar click y ver estas páginas como medio de distracción (el cual, en ocasiones nos quita más tiempo del debido) el internet y las redes sociales son una buena opción, no solo para “recolectar información” sino también para quitarnos un poco el estrés tan típico de una ciudad como la nuestra.

domingo, 26 de septiembre de 2010

Y si no encuentras la inspiración, invéntala

Hace poco al pensar que podría plasmar en mi blog, varias ideas vinieron a mi mente, pero así de rápido como surgieron así de fugaces se volvieron. Entonces pensé si el miedo a plasmar más de lo que quiero se estaba apoderando de mis pensamientos, o bien, la fatiga emocional que había experimentado días antes estaba teniendo consecuencias graves en mi creatividad.
Fue en ese momento de dubitación cuando pensé: ¡caray! si no encuentro la inspiración mejor me la invento, o mejor aún, busco en sueños algo o alguien que me ayude a activar el botoncito de la imaginación dentro de mis pensamientos, porque más me vale encontrar algo que escribir.
Entonces pensé en los sueños y la capacidad asombrosa que tiene el ser humano para crear mundos enteros mientras duerme, o bien, como la ruta perfecta para escapar de la dolorosa realidad y crear castillos en el cielo, así sería mi castillo perfecto, sobre una nube, si tuviera que ser la princesa de un lugar sin nombre, en donde la principal norma sería considerar la posibilidad de ser feliz en todo momento, o de sonreír hasta en las situaciones más difíciles, donde se comprueba de que están hechas las personas.
Supongo que después de todo la inspiración estaba ahí, solo tenía que dirigirla algún tema, y los sueños son siempre un tema recurrido en mi vida, ya que considero que en ocasiones son solo una extensión de la realidad, y en otras, el punto de partida de la inspiración de la cual, me considero una verdadera adicta, finalmente todos tendemos a las adicciones y por qué no serlo de una que nos alegre la vida y nos permita liberar las tensiones de la vida diaria.
Así que ya saben, sino encuentran la inspiración solo invéntenla, o mejor dicho, solo búsquenla en los rincones de sus pensamientos, quizá solo estaba tomando un pequeño descanso, o bien, solo necesitaba el momento adecuado para volver a ponerse a trabajar, aunque para mí, la inspiración se puede encontrar hasta en el más mínimo detalle, solo depende de nuestra capacidad para apreciar las pequeñas sorpresas diarias que tomamos como cotidianas, pero que si observamos con atención podrían proporcionarnos un largo rato de alegría y sonrisas.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

perdonar es divino...

¿Alguna vez han pensado el daño que pueden ocasionarle a una persona sin saber la gravedad del asunto?
Debo de confesar mi culpa en  este sentido, ya que en diversas ocasiones mis palabras o mis acciones han lastimado a las personas que estimo, y lo peor del asunto como dicen, es que no hay nada que pueda remediar ni solucionar el daño, ¿es por ello que dirán que perdonar es divino?
 Una canción de Cerati trajo a mí estas preguntas, es decir, ¿es divino porque solo un ser ominipresente puede perdonar los actos de un simple mortal?  o bien,  ¿por qué perdonar produce en nosotros un sentimiento divino?
Considero que perdonar no solo es un acto de valentía, ya que nada te garantiza que no podrán volver a hacerlo, sino que implica una cierta confianza que somos incapaces de notar, ya que al perdonar volvemos a depositar en esa persona la esperanza de continuar como antes, o al menos dejar el conflicto de lado por un momento.
Perdonar es liberador, ya que al hacerlo, no añadimos mas cadenas que nos unan con el pasado, y mucho menos generamos en nosotros sentimientos como el rencor, aunque también podría pensar que perdonar es sinónimo de ingenuidad, sin embargo, no podría aplicarlo como generalidad ya que depende del daño y la relación con la persona a perdonar, o de la que esperamos nos perdone sin añadir ninguna traba.
Perdonar es divino, pero hasta que punto somos capaces de hacerlo, y con qué facilidad exigimos que lo hagan con nosotros, cuando en realidad no sabemos el peso que conlleva la frase “te perdono” cuando no estamos preparados para hacerlo, cuando quizá nunca lo estaremos, porque quizá a nuestra confianza se le terminaron los documentos para tramitar un nueva disculpa, y cuando los administradores como nuestro paciencia y los sentimientos han decidió ponerse en huelga y cerrar los procesos burocráticos a los que estamos tan acostumbrados en nuestro país.
Así que hoy me pregunto, si perdonar es divino, alguien podría proporcionarme la formula exacta para hacerlo, sin dejar rastro del daño y por otro lado, para evitar verme en la penosa necesidad de herir a alguien más y no contar con las palabras que reconforten al alma. Así que si saben de algún método para perdonar y ser perdonado no duden en comunicarse conmigo a la brevedad, y si en algún momento se me olvida darles las gracias por los tips, no olviden que perdonar es divino.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Cada loco con su tema...

Hace poco escuchando una canción de un grupo cubano llamado Orishas, la frase de “cada loco con su tema” resaltó entre el ritmo tan característico de los habitantes de la isla socialista y de las frases tan acertadas que suelen incluir en sus letras. Después de todo, supongo que cada quién es libre de pensar las locuras que se le atraviesen por la mente, además de que esto no tiene ningún costo, lo cual, después de atravesar una crisis económica tan severa en el mundo, resulta bastante benéfico no solo para las emociones, sino también útil para el incremento del ingenio.
 También pensé los problemas que pueden surgir cuando un loco comienza a pensar cosas destructivas, negativas no solo para el individuo mismo, sino también que resulten desastrosas para la comunidad entera, ahí el beneficio de los pensamientos sin costo resulta contraproducente, y más valdría cobrar una cuota a esas personas antes de que las ideas se les escapen de las manos.
En este punto pensé, que en ocasiones, sin notarlo, el mismo entorno en el que nos desenvolvemos nos limita, nos excluye y nos lleva por caminos que quizá jamás quisiéramos conocer, pero al no saber  más rutas, nos dirigimos a las conocidas por nuestros antecesores, muchas veces corriendo con más suerte que ellos, al lograr cambiar la dirección de nuestro paso por la vida.
Qué extraño el ser humano, que al vivir en sociedad nunca comprenda la complejidad de la misma, y aun más grave, que nunca asimile su lugar en la dinámica que se genera en ella, lo que lo lleva a limitar sus alcances y a desconocer sus propias deficiencias.
Sin duda, como dicen por ahí “cada loco con su tema”.

martes, 14 de septiembre de 2010

un punto a la mitad de la frase...

Ayer, al comenzar un trabajo de investigación, a mi mente vino la idea de un punto a la mitad de una frase, y lo que esto podría significar. Un punto a la mitad de la frase bien podría ser un error de puntuación, o visto de otra forma, un punto fuera de lugar, como quien esta en medio de muchas personas y al final se siente completamente salido de contexto.
Por otra parte, un punto a la mitad de una oración podría ser una nueva forma de estructurarla misma, o bien un punto (rebelde) el cual no deseo estar al final, ahí simplemente olvidado, marcando el final de una idea y dando paso a otra, un punto que se sincero consigo mismo encontrando más agradable el lugar entre las palabras, aunque esto le quite importancia a su esencia  y finalmente le haga preguntarse una vez más acerca del lugar que le hubiera gustado tener en las frase, y si la costumbre de haberlo colocado siempre al final, ha marcado ya su propio espíritu.
Quizá ese punto en ese lugar, no busque más que hacernos pensar en donde estamos parados, si ese lugar en realidad es el que nos corresponde, o aun más importante, si es sitio donde queremos estar, ya que no sirve contar con un rol, como en una obra de teatro, sino sabemos en realidad como interpretar al personaje y peor aun si nos sentimos ajenos al mismo.
Cuestionarse siempre acerca del lugar en donde nos encontramos, más allá de generarnos dudas y problemas que un buen psicólogo estaría dispuesto a tratar a cargo de un buen pago, nos permite estructurar nuestros pensamientos de otra manera, y como el punto pensando en las palabras, es bueno conocer quienes nos rodean, estar seguros de su lugar a nuestro lado y tener en cuenta que el punto final lo podemos tener nosotros, siempre y cuando estemos seguros del lugar en el que deseamos estar.

sábado, 11 de septiembre de 2010

de los autores, mi autor

Como algunos de ustedes saben, José Saramago es mi autor preferido. Este erudito portugues, ganador del Premio Nobel de Literatura en 1998, captó mi atención desde las primeras páginas del libro titulado "Ensayo sobre la Ceguera", sin dejar de mencionar que dicho libro, también provocó en mi una especie de pánico, ya que al dar vuelta a la hoja y seguir involucrandome con la trama, el miedo a la ceguera de la que hace referencia el mismo titulo se hacia presente, la cual no sucedió y aquí va un respiro de alivio.

Sin duda, es un libro que recomiendo ampliamente, aunque debo de decir que hasta el momento mi preferido es  "Las intermitencias de la muerte" en donde, en un país anónimo la gente deja de morir, trayendo consecuencias graves para la organización social del Estado y la consecuente creación de una maphia, que permite a las personas fallecer al otro lado de la frontera. A esto se añaden personajes como la muerte y un violonchelista, que dan un giro a la novela, la cual, si bien es una situación imposible, nos permite analizar la naturaleza humana y su indiscutible lazo con la muerte.

Aquí les dejo dos escritos de Saramago, provenientes de un blog que tenía antes de su muerte en junio del presente año, y que en lo personal han llamado mi atención, y para aquellos interesados, la dirección en línea es la siguiente: http://cuaderno.josesaramago.org/ Espero os guste ;)

No se puede matar al amor


Por Fundação José Saramago

Yo creo que el sentimiento es como la Naturaleza. No podemos, en nombre de la experimentación, de la frialdad científica, de la objetividad y de todas esas cosas, expulsar el sentimento de nuestras preocupaciones y de las obras que vamos escribiendo. El sentimiento estará siempre de moda, porque hombre y mujer siempre sentirán amor. No se puede matar al amor. Por eso tiene una presencia tan importante en mis novelas.

“La isla ibérica. Entrevista con José Saramago”, Quimera, Barcelona, nº 59, 1986

La pregunta fundamental de las humanidades

Por Fundação José Saramago


Desde el punto de vista empresarial, no hacen falta las humanidades. La pregunta fundamental de las humanidades es qué es el ser humano, mientras que, para los círculos empresariales y tecnócratas que se ocupan de la utilidad inmediata, [la pregunta] es para qué sirven los seres humanos.

“El paso del gran pesimista”, Semanario Universidad, San José de Costa Rica, 30 de junio de 2005



Tres puertas principales


Por Fundação José Saramago

Leer e imaginar son dos de las tres puertas principales —la curiosidad es la tercera— por donde se accede al conocimiento de las cosas. Sin antes haber abierto de par en par las puertas de la imaginación, de la curiosidad y de la lectura —no olvidemos que quien dice lectura dice estudio—, no se va muy lejos en la compresión del mundo y de uno mismo.

“El concepto de utopía ha hecho más daño que bien”, La Prensa Gráfica, San Salvador, 1 de junio de 2005

viernes, 10 de septiembre de 2010

5 minutos...

El otro día mientras hacia un poco de la interminable tarea, la cual parece contradecir las leyes de la naturaleza al crearse por generación espontánea, pensaba acerca de todo el tiempo que perdemos estresándonos y cumpliendo con labores que, en ocasiones, resultan absurdas, y que no dejan tiempo para lo que algunos sabios conocen como alimentar el alma.
En este sentido, pensaba como no podemos darnos ni 5 minutos para charlar con alguien, para saber como se siente, no diré que darnos tiempo para conocerla, porque quizá, eso nos llevaría una vida completa, y tendríamos que sumarle años enteros para terminar con la misión de adentrarnos a la visión que alguien pueda tener de la vida, y eso si corremos con suerte.

Es así, como pienso que el ser humano en esta vida social tan precipitada y rápida, en donde lo que importa es quien corra mas rápido y no quien lo haga con verdadera devoción, nos olvidamos de compartir sonrisas o simplemente no tomamos en consideración el tiempo de sentarnos y escuchar nuestros pensamientos, a veces más lucidos e interesantes que todo aquél espectáculo tecnológico que parece absorbernos.

Pienso que la propia vida de la urbe consume la nuestra, en una dinámica cada vez mas rápida e intensa, en la que sino te mueves, bien podrías morir arrollado. Yo me di esos 5 minutos hoy para escribir este post, para pensar que es lo especial de esta vida, a lo que añado lo mucho que disfruto estar con mis amigos, leer novelas, escuchar música, y en este sentido, cuanto extraño hacer cosas por convicción y no por mera obligación.

Espero que todos nos demos esos 5 minutos, por lo menos una vez en la vida, en tanto que consideremos nuestra salud mental al borde de la locura, o bien, en dejar libres los pensamientos al azar, uno nunca sabe que sorpresa se puede hallar en nuestras propias ideas.